A pocos días de las PASO en las que se eligen los candidatos que disputarán la presidencia, los empresarios del agro expusieron sus críticas a políticas para el sector. El encuentro organizado por IDEA ( Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina) se realizó esta tarde en Rosario y fue muy concurrido.
La lista de pedidos a quienes puedan ser elegidos fue encabezada por el reclamo de eliminar la brecha cambiaria. la economista Marina Dal Poggetto, lo explicó de esta manera: «La brecha cambiaria es la principal distorsión de la economía, el exportador recibe la mitad del precio y el importador paga la mitad de lo que vale el dólar, es un subsidio del exportador al importador».
En esa línea, Enrique Humanes, director de IDEA, sostuvo: “Es muy difícil que haya inversión si no se elimina el diferencial de los tipos de cambio”, sostuvo.
La jornada llamada Experiencia IDEA Agroindustria se realizó bajo el lema Nos volvemos a ilusionar, hagamos que valga la pena. “Nosotros estamos obsesionados con la generación de empleo. Con brecha no hay inversión y sin inversión no hay empleo”, afirmó Daniel González, director ejecutivo de la entidad.
Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural, exigió “que las cosas sean claras y concretas. Necesitamos dinamizar mucho más la producción, queremos producir más y mejor. El mundo demanda lo que nosotros hacemos, no solo alimentos sino también energía y minería y economía del conocimiento. Tenemos talento y cabeza empresaria, les pedimos a los que gobiernan que nos den las condiciones para que eso suceda”, expresó.
Además, advirtió: “Hay que hablar del tema derechos de exportación, no podemos obviarlo más, las retenciones tienen que ser cero; hay que hablar de tipos de cambio; y hay que hablar previsibilidad, si no, se va a poner muy difícil”.
Ignacio Bartolomé, CEO de GDM (Grupo Don Mario) pidió un marco en el que se reconozcan las obtenciones de semillas que hacen las empresas. «En otros países, el respeto a la propiedad intelectual está por encima del 60%, hasta el 80%, los productores pagan por las variedades que utilizan. En Argentina, 7 de cada 10 no pagan por la tecnología que desarrollan compañías como la nuestra”, indicó.
Por eso, reclamó una ley de semillas moderna. “Hay que ser sinceros, si uno quiere tecnología, la tiene que pagar”, remarcó en un mensaje dirigido para que los productores cambien de actitud. Eso sí, aseguró que GDM continuará en Argentina: “Vamos a seguir estando acá por siempre”, dijo.
Pino recogió el guante y coincidió en que “hay que pagar la tecnología y las innovaciones», pero señaló que «las condiciones para que eso ocurra las tiene que dar también el Estado, para que el productor invierta, porque el productor no es que no quiere pagar, el productor está harto de pagar y de que no haya una política lógica”, argumentó.
Ignacio Lartirigoyen fue otro de los expositores. El presidente de la empresa que lleva su apellido, pidió previsibilidad, reglas claras, y también «mucho diálogo». Y centró sus críticas en la pesada carga impositiva.
Lo dijo de este modo: “Tenemos casi 70 impuestos. No pido una reducción de impuestos pero sí que los simplifiquen, que se unifiquen, que le simplifiquen la vida desde el productor agropecuario hasta empresas como nosotros”, dijo. Y sorprendió con su confesión: “A los empresarios nos está yendo bien; los sindicalistas son siempre los mismos y les va bien; los políticos, también; pero al país le va pésimo: ¿qué estamos haciendo todos para que pase esto?”.
Mariano Bosch, cofundador de Adecoagro, destacó que la lechería argentina produce de manera eficiente y sustentable y que la actividad tiene una gran oportunidad a nivel global, pero indicó que para aprovecharla es necesario que haya una estabilización cambiaria y que se eliminen los derechos a la exportación de la leche en polvo que en la actualidad tributa un nueve por ciento. “¿Por qué algo de tanto valor agregado como es la leche tiene tantas retenciones? Esas son las cosas que no tienen sentido como país agroindustrial”, opinó.
«Argentina está con una oportunidad espectacular: tiene al agro como cabeza de innovación y de la mano de la producción de gas nos puede transformar en un gran productor de fertilizantes. Hay que diferenciar la emergencia del corto plazo y la oportunidad de largo plazo, Pero para ser competitivo tenés que liberar todas las trabas. Ser capaces de producir en las condiciones en que hemos producido… es casi magia lo que hemos hecho hasta ahora», destacó Gonzalo Ramírez Martiarena, CEO Swiss Pampa y director no ejecutivo de COFCO International.
La agroindustria en Argentina tiene un enorme potencial para aumentar la producción de manera sustentable, sin embargo, según Paula Altavilla, presidente de IDEA, “eso necesita un entorno mucho más favorable, con previsibilidad, en el que se favorezca la transformación, la innovación, el desarrollo del talento, donde tengamos no solamente reglas de juego claras sino también programas y planificación de largo plazo con una macroeconomía estable y todo eso lo podemos hacer dialogando, generando planes de acción que podamos ejecutar en el largo plazo”, explicó.
Al cierre, González subrayó: “Somos parte del mundo y el mundo avanza en una dirección determinada, no podemos dejar que esta oportunidad histórica para el agro y la energía pase nuevamente, porque vamos a arrepentirnos”.