Elías Salamanca tiene su chacra justo pasando el Trelew Rugby Club, en dirección a Rawson, y su vida en la zona está marcada por el trabajo en la tierra y la crianza de animales. Sin embargo, en los últimos días, enfrentó una situación muy triste y preocupante.
Recientemente, el productor sufrió la pérdida de su pequeña potranca, que no solo era parte de su ganado, sino también una querida mascota para sus nietos.
La familia vive en el lugar los fines de semana y, aprovechando su ausencia, delincuentes entraron al predio. Allí carnearon al animal de un año y medio, dejando sus restos abandonados en el lugar.
Los restos fueron dejados en el propio predio donde vive la familia.
Jornada
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Este acto no solo representó una pérdida emocional para Elías y su familia, sino que también pone de manifiesto una problemática que afecta a muchos productores en la región: el aumento de la inseguridad y la impunidad en el ámbito rural. “Nos viven robando los animales, las herramientas, y nadie hace nada por nosotros”, afirmó en diálogo con Jornada, tras la matanza de su potranca de un año y medio.
“La vecindad viene sufriendo el azote de la delincuencia desde hace años; pasa la policía un tiempo, se van y los ladrones vuelven”, comentó.
Trelew Rugby Club
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Salamanca cuestionó duramente la falta de seguridad en toda esa zona límite entre Rawson y Trelew, al sostener que “ya no se puede seguir viviendo de esta manera”, porque todo lo que uno puede generar con trabajo puede desaparecer en tan solo minutos. “¿Quién puede seguir produciendo por estos lados si esto sigue?”, se preguntó.
El productor comentó que la época de otoño es la elegida por los cuatreros porque los animales están gordos, y en este marco, lamentó la muerte de su potranca, ya que el animal había sido criado desde su nacimiento y era la mascota de sus nietos.
“La crías con esfuerzo para que un día tus nietos puedan andar, y te lo matan cruelmente estos malparidos. ¿Qué hay que hacer?”, reflexionó y denunció que la carne del animal fue ofrecida en redes sociales.
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“En 2024 me robaron lechones; a otro chacarero le llevaron corderos. A otro vecino cerca de La Flor Amarilla le desvalijaron la chacra de herramientas. ¿Quién nos protege?”, finalizó.