En pleno monitoreo del acuerdo vigente con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Gobierno argentino confirmó un nuevo desvío respecto a las proyecciones económicas incluidas en el programa firmado con el organismo.
Luego de haber comunicado que no alcanzará la meta de acumulación de reservas, el Ministerio de Economía informó ahora que tampoco se cumplirá con la estimación de la cuenta corriente de la balanza de pagos para 2025.
Aunque este punto no forma parte de las “metas duras” acordadas en el staff report del Fondo, sí figura como una proyección relevante dentro del marco del programa económico. La novedad fue presentada como un “incumplimiento técnico” y, según la explicación oficial, se debe a un crecimiento de la economía mayor al esperado.
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El encargado de hacer el anuncio fue el viceministro de Economía, José Luis Daza, durante un foro económico del Instituto Internacional de Finanzas (IIF), realizado en Buenos Aires.
Aunque este punto no forma parte de las “metas duras” acordadas en el staff report del Fondo, sí figura como una proyección relevante dentro del marco del programa económico
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Según explicó, la cuenta corriente cerraría el año con un déficit del 2% del PBI, lo que representa una diferencia significativa frente al 0,4% estipulado inicialmente en el último informe técnico del FMI. En términos relativos, el desvío equivale a un incremento de 400% respecto de la proyección original.
Daza señaló que este nuevo desequilibrio en el frente externo no responde a una mala gestión, sino a un efecto natural del repunte económico que experimenta el país. “Un país que crece al 6% puede tener un déficit del 2%. Lo importante no es solo el tamaño, sino la calidad del déficit”, afirmó.
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El viceministro, que trabajó junto a Luis Caputo en fondos de inversión en Wall Street y hoy es su número dos en el Palacio de Hacienda, aseguró que la recuperación de la demanda interna, sumada a términos de intercambio menos favorables, explican gran parte de esta desviación.
Daza señaló que este nuevo desequilibrio en el frente externo no responde a una mala gestión, sino a un efecto natural del repunte económico que experimenta el país
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Además, remarcó que países de la región enfrentan desequilibrios similares o mayores, incluso con tasas de crecimiento menores. “Hay países con déficits de 2,5% o 3% del PBI y que crecen al 2%. Argentina está creciendo más y eso explica este resultado”, sostuvo Daza.
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Pese a este nuevo desvío, el Gobierno aseguró que la relación con el Fondo sigue siendo estable y que la comunicación fue clara desde el principio. “Vamos a seguir monitoreando el déficit de cuenta corriente, pero nos sentimos cómodos con este escenario”, concluyó Daza.
El anuncio se produce días después de que el FMI aprobara un nuevo desembolso de USD 20.000 millones para la Argentina, en el marco de una negociación que sigue abierta y en constante ajuste.
Con información de Noticias Argentinas, redactada y editada por un periodista de ADNSUR