Este sábado se produjo un descarrilamiento parcial del Tren Patagónico, cuando se encontraba en el tramo final de su trayecto entre Viedma y San Carlos de Bariloche. El suceso tuvo lugar en una de las curvas más cerradas de la zona de Ñirihuau, a escasa distancia del acceso a la ciudad.
Aunque cuatro coches del tren resultaron involucrados, no hubo personas lesionadas y la formación logró arribar a destino con aproximadamente una hora de retraso.
De acuerdo con lo informado por Roberto López, presidente del Tren Patagónico, el motivo del incidente fue la fractura de un riel:
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“Cuando la locomotora y parte del tren ya habían pasado, en plena curva se partió un riel, lo que provocó que se levantara la vía y eso enganchó varios vagones: el coche comedor, un camarote y la usina. Eso generó el descarrilamiento”, explicó en diálogo con El Cordillerano.
La rápida respuesta del personal permitió la continuidad del viaje: “El tren se frenó, se desacopló la parte afectada y los pasajeros fueron trasladados en los coches que estaban en condiciones. Incluso con el traslado solamente se atrasó una hora de la llegada habitual del tren”, precisó López.
Desde la empresa remarcaron que se trató de una falla puntual, difícil de anticipar: “Estábamos trabajando en la zona, incluso el servicio turístico pasó por ese mismo tramo un día antes y no se detectaron anomalías”, indicó el titular de la compañía. “Esto es algo que puede pasar, no es algo habitual pero sucede”, sostuvo.
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En principio, no se habrían producido daños estructurales graves en los vagones. “El accidente solamente sacó de eje a los vagones. No hubo golpes ni heridos. Ahora se está trabajando para reparar el sector afectado”, añadió.