En diálogo con Canal E, el economista Gonzalo Mosquera analizó la reciente estabilidad del dólar y advirtió que las causas estructurales detrás de su suba siguen intactas.
JP Morgan, el carry trade y la ilusión del dólar tranquilo
“El dólar subió un 15% desde fines de junio, pero se tranquilizó en los últimos días“, explicó Mosquera, y atribuyó esta baja a dos factores clave: el informe de JP Morgan que recomienda volver al carry trade en Argentina, y la flexibilización de metas por parte del FMI.
“El Gobierno se compromete a sostener un valor del dólar futuro, eso asegura una rentabilidad en dólares muy interesante“, afirmó el economista, quien remarcó que esto motiva a muchos inversores a vender sus dólares para apostar por tasas en pesos.
“El FMI le dio un ‘waiver’ al Gobierno, quitando presión sobre la acumulación de reservas“, agregó, lo que también contribuyó a frenar la suba cambiaria momentáneamente. Sin embargo, advirtió que “las razones de fondo que explican la suba siguen estando y van a seguir estando”.
Entre esas causas, destacó la necesidad de que el Gobierno acumule reservas para afrontar pagos, y la política monetaria actual que implica tasas más altas, dificultando la renovación de deuda y aumentando la presión sobre la emisión monetaria. “El motorcito de fondo que genera la suba del dólar y de los precios sigue estando”, enfatizó.
Inflación creciente y dudas sobre el futuro de las bandas
Respecto a los precios, Mosquera fue claro: “Ya se habla del 3% para agosto, y yo en mi día a día lo estoy sintiendo“, dijo. Aunque la inflación núcleo en julio dio 1,9% en la Ciudad de Buenos Aires, advirtió que “el efecto fuerte se va a sentir en agosto”.
El economista también cuestionó la sostenibilidad del modelo oficial: “Es barrer bajo la alfombra“, señaló, refiriéndose al uso del dólar futuro y al *carry trade* como mecanismos temporales para contener la presión cambiaria.
“En algún momento eso va a aparecer“, afirmó, y explicó que si el dólar oficial se ubica por encima del precio pactado, el Gobierno deberá emitir pesos para cumplir, lo que reaviva el círculo de presión sobre precios y tipo de cambio.
Sobre la continuidad del esquema de bandas, expresó dudas: “Yo tengo muchas dudas de que lo puedan sostener“, pese a que desde el Gobierno y JP Morgan insisten en su mantenimiento.
Finalmente, Mosquera advirtió sobre un escenario riesgoso para 2025:”Una vez que tocas el techo de la banda, el Banco Central empieza a perder reservas todos los días“, y recordó que “esas reservas son prestadas“, lo cual, según él, podría “generar pánico o algún tipo de corrida” si el esquema no se ajusta a tiempo.