Joaquín Levinton, el carismático exlíder de Turf que se compró un “hamster lisiado”, fue interceptado por Implacables (El Nueve) y no dudó en responder con total sinceridad cuando le preguntaron si volvería a participar en un reality.
El músico, que brilló por su personalidad espontánea y descontracturada en MasterChef Celebrity, dejó en claro que lo suyo con la televisión fue una experiencia única… y que no piensa repetirla: “Ya está, es una vez en la vida”, respondió, entre risas, cuando la notera le consultó sobre una posible vuelta a la TV.
“Me la pasé re bien, me divertí, conocí gente hermosa, pero ahora no”, dijo Levinton, cerrándole la puerta a cualquier regreso… ¿o no del todo? La charla subió de tono cuando surgió la posibilidad de verlo en Gran Hermano Famosos, la edición con celebridades del reality más famoso del país.
Sin filtro, Joaquín lanzó una frase que dejó en claro que ese formato no es para él: “¡No, me muero! Me da claustrofobia. Matas a alguien ahí adentro. Yo no puedo convivir con alguien ni en la vida real…” La confesión arrancó carcajadas.
Es así que el músico mostró una faceta poco conocida, que prefiere su espacio, su rutina y su libertad antes que la exposición extrema de una casa monitoreada 24/7. “No podría durar ni dos días”, agregó, dejando en claro que la convivencia no es lo suyo.
Pero la nota no quedó solo en el tema reality. También hablaron del terrible escándalo que tuvo con la empresa AySA por una deuda en una propiedad que, según se supo, fue comprada con una deuda millonaria de servicios públicos.
Al respecto, Levinton fue tajante: “Vendí esa casa, te juro. Lo tuve que pagar. Le pagué al chabón que compró la casa, no le pagué a AySA”, explicó, desligándose de cualquier responsabilidad actual y dejando en claro que ya solucionó ese capítulo de su vida.
En plena movida artística, Joaquín disfruta de su música y de su vida lejos del escándalo, aunque siempre deja alguna frase picante que lo vuelve viral. Su paso por MasterChef fue celebrado por los fans, pero su postura con los realities es clara: una vez basta.
Con su estilo auténtico, su ironía siempre afilada y esa mezcla única de rock y humor que lo caracteriza, Joaquín Levinton se mantiene fiel a sí mismo. Reality shows, deudas pasadas o fama televisiva, todo lo toma con liviandad y un poco de sorna. Por ahora, lo suyo sigue siendo la música y la libertad.