El humorista Gato Peters murió en la noche del viernes 15 de septiembre, a los 68 años, tras un infarto poco después de haber realizado un show en la localidad bonaerense de Trenque Lauquen.
La agencia productora Poggini dio la triste noticia a través de su cuenta en las redes sociales: «Regresando de un show en Trenque Lauquen sufrió una descompensación en la localidad de Francisco Madero y falleció al ser trasladado a la ciudad de Pehuajó».
Agregaron que «su partida deja un vacío irremplazable en el mundo del humor y el entretenimiento».
«La noticia de su fallecimiento ha conmovido a seguidores, colegas y amigos. Gato Peters será recordado como un artista extraordinario y un ser humano excepcional. Nuestros corazones están con la familia y seres queridos del Gato Peters en este momento de pérdida», puntualizaron.
Ricardo «Gato» Peters desarrolló su carrera en teatros, radio y TV. Foto: FBEl “Gato” Peters había comenzado una gira que partió en Mar del Plata, donde se había propuesto recorrer al menos 140 pueblos en menos de un año.
Una vida dedicada al humor
Peters nació el 11 de marzo de 1955 en Carhué, provincia de Buenos Aires y desde muy joven demostró su innato talento para hacer reír a las personas.
El flyer del último espectáculo del Gato Peters.Comenzó su carrera en los escenarios universitarios de La Plata y a partir de su llegada a la televisión rápidamente se convirtió en un fenómeno nacional en el ámbito del humor. Su estilo único y su carisma conquistaron a audiencias de todas las edades durante más de tres décadas.
A lo largo de su vida logró un legado importante en el mundo del entretenimiento. Sus actuaciones en teatros, festivales y televisión lo consagraron como uno de los comediantes más destacados de su generación.
Su humor inteligente, su capacidad para abordar temas cotidianos y su habilidad para conectar con la gente lo convirtieron en un referente del humor bonaerense y nacional.
Fernando Bravo, fan del Gato Peters.En septiembre del año pasado, el popular humorista recibió el premio ‘Rector Ricardo Rojas’, de la Universidad de Buenos Aires, en una ceremonia donde desplegó su ingenio junto a Fernando Bravo.