La cantante conmovió en el show con la mayor cantidad de fans del primero de los cuatro días de festival. Homenajeó al fallecido actor Angus Cloud.
La primera jornada de Lollapalooza Chicago provocó una revolución en la ciudad de 2,7 millones de habitantes. Desde antes de que abrieran las puertas del festival, el desfile de looks que iban desde brillos, glitter, sin dejar de lado sombreros y botas de cowboy inundaron “El loop”, como se llama al barrio céntrico. La gran mayoría fue presenciar el cierre de la primera fecha a cargo de Billie Eilish, pero hubo algunas sorpresas más.
Los organizadores vendieron más tickets que el año pasado, para este Lollapalooza calculan que pasarán unos 430 mil espectadores entre los cuatro días y la muchedumbre se ve en las veredas, las calles, los lobbys de los hoteles y en los mercados, donde compran algunas latas de cerveza algo más baratas que los 13 dólares que pueden costar adentro del predio.
En pleno verano verano, el calor del mediodía sofoca pero poco le importa a las largas peregrinaciones de jóvenes que caminan hacia el Gran Park. Apenas abrieron las puertas, cientos de menores de 20 fueron los que encabezaron la procesión para distribuirse frente a los siete escenarios, que en el caso de los dos principales distan a once cuadras uno del otro.
Una banda coreana para abrir
Más allá del color en los llamativos atuendos o en los puestos para pinturas en la cara, en el plano musical el primer alarido agudo se lo llevó Newjeans, la banda de las cinco coreanas menores de 20 que con sus pegadizas melodías dance pop cautivan al público.
Muchas fans estaban vestidas como ellas y en una de sus manos el “Binki Bong”, un palo blanco que termina en forma de herradura, símbolo del grupo. Cada coro que cantaban se gritó en el escenario principal y desde el pasto también se siguieron las coreografías.
Apenas terminaron, en el escenario de enfrente el rapero Rema intentó cautivar al público y hasta tocó unos acordes de Carlos Santana, pero la estrella de la tarde fue el DJ Timmy Trumpet.
Mientras los últimos rayos de sol pegaban en los vidrios de los rascacielos de Chicago, Timmy Trumpet hizo honor a su nombre y en varios pasajes tocó la trompeta, de la que hasta incluso sacó fuegos artificiales. Un showman que pide más lineups en Lollapalooza. Fue el primero que logró testear el pasto del Gran Park ya que el público saltó casi la hora completa de su performance.
Karol G y Billie Eilish, estrellas de la noche
Vestida con la camiseta y el pantalón de los Bulls de Chicago, con el número 23 en la espalda y el apellido Jordan (por Michael), máximo ídolo deportivo de la ciudad, la californiana fue presentada por el alcalde de Chicago.
Uno de los momentos más emotivos fue cuando cantó Never Felt So Alone, una canción que fue utilizada en la segunda temporada de la serie Euphoria, que tenía entre sus protagonistas al actor Angus Cloud, fallecido hace pocos días.
Después levantó a la multitud de todas las edades que fue a cantar sus hits, y a las 22.04 estallaron los primeros fuegos artificiales que dieron por cerrada la primera jornada de un Lollapalooza Chicago que arrancó a pura intensidad y espera por la primera presencia argentina en Chicago de la mano de los mendocinos Usted señalemelo para este sábado.
Enviado especial.
WD