Oscar Antonio Candussi fue encontrado culpable del delito de homicidio culposo de José Carlos «Kily» Rivero, el chico de cuatro años que murió en 2012.
Un productor agropecuario de la localidad Lavalle, en Corrientes, fue condenado este jueves a tres años de prisión condicional por la muerte de un niño como consecuencia de una intoxicación con agroquímicos.
Se trata de Oscar Antonio Candussi, que recibió una pena de tres años de prisión en suspenso por el delito de homicidio culposo de José Carlos «Kily» Rivero, el chico de cuatro años que murió en 2012 por una intoxicación aguda producto de las fumigaciones.
Candussi fue hallado culpable debido a las evidencias de haber fumigado con pesticidas su plantación de tomates distante 15 metros de donde vivía el pequeño, que resultó víctima de la intoxicación.
Y explicó que, si bien el imputado no quiso causarle la muerte directamente al pequeño, por su actividad como productor agropecuario y experiencia debía saber que, si utilizaba agrotóxicos que llegaban a la familia del pequeño, podía producirle consecuencias e incluso el fallecimiento.
María Eugenia Sánchez, madre de la víctima, lamentó que «hayan pasado 11 años para la realización del juicio» y mostró su esperanza de que «se tome conciencia, para que no le pase a ningún niño más lo que vivió Kily».
El Tribunal de Juicio de Goya, con jurisdicción en la localidad de Lavalle, abrió a las 9 la última jornada de debate, oyó a los últimos testigos que cerraron la etapa de recolección de testimonios, habilitó los alegatos y desde el mediodía deliberó hasta dictar la condena esta tarde.
Los jueces a cargo del proceso fueron Jorge Antonio Carbone, como presidente del tribunal, junto a Ricardo Diego Carbajal y Darío Alejandro Ortiz.
La trágica muerte de «Kily» Rivero en Lavalle
El pequeño José “Kily” Rivero murió el 12 de mayo de 2012 a causa de un paro cardiorrespiratorio por falla hepática fulminante de origen tóxico, según se desprende de los informes médicos, historias clínicas, informes químicos y autopsia, entre otros.
Su fallecimiento se produjo en el Hospital Garrahan de la ciudad de Buenos Aires, tras ser derivado del hospital pediátrico Juan Pablo II, de la Capital de Corrientes.
Después de la denuncia de sus padres, que aseguraban que había sido intoxicados a causa de las fumigaciones que la empresa de Candussi hacía a solo 15 metros de su casa, en una plantación de tomates, la Justicia inició una investigación que llevó más de una década en ser llevada a juicio oral.
La familia de Kily también tuvo que lamentar en 2021 la muerte de su hermana Antonela, de 15 años, por cáncer. Los médicos establecieron que no estaba vinculada con agroquímicos.
Con información de Télam.