Ocurrió en el Colegio Corazón de María. Cuatro de los chicos debieron ser trasladados al hospital.
09/06/2023 14:09
Clarín.com Sociedad Actualizado al 09/06/2023 14:47
Unos 25 chicos de entre 13 y 14 años resultaron intoxicados con monóxido de carbono, a causa de una fuga de gas en una escuela del barrio porteño de Palermo.
Ocurrió en el colegio Corazón de María, ubicado en la calle Guise al 1900. Allí debieron concurrir los bomberos, luego de una denuncia por olor a gas que sintió personal del establecimiento.
En la vía pública fueron asistidos de forma preliminar dos menores por sentir mareos y náuseas. Los efectivos procedieron a evacuar el establecimiento en orden y sin pánico.
De entre los menores asistidos, dos de ellos fueron trasladados por el SAME al Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez y otro a la Clínica Bazterrica, por intoxicación por monóxido de carbono.
La empresa Metrogas, por su parte, informó que encontró «una pérdida en los circuitos de la cañería y que los artefactos no están en condiciones para su funcionamiento«, por lo que se decidió el «corte del suministro gaseoso«.
Según indicó el titular del SAME, Alberto Crescenti, la fuga se produjo en la estufa de una de las aulas de la institución. “Pudimos ponerles oxígeno a los chicos en las ambulancias”, contó en diálogo con TN.
Además el doctor contó la extraña situación que vivió cuando llegó hasta la escuela: «Nosotros llegamos alertados porque el hijo de una trabajadora del SAME le comentó que estaba con dolor de cabeza, mareos y náuseas y que al parecer había mas chicos en la misma situación», comenzó.
Crescenti dijo que cuando finalmente arribaron hasta la institución se encontraron con que efectivamente eran más de 20 los jóvenes con esos síntomas. El problema, según contó, se originó cuando quisieron ingresar al colegio para asistir a los alumnos.
«El médico que estaba en el interior de la escuela nos dijo que ya habían pedido una ambulancia privada, que los chicos estaban bien y no nos dejaba pasar. Lo mismo nos dijo una de las autoridades del colegio», denunció.
«Nosotros hasta no ver a los chicos no nos íbamos a retirar. Era un solo médico con 25 chicos y además teníamos la alerta de que estaba desbordado«.
El titular del SAME agregó que se cree que la estufa en cuestión estaba dentro del aula donde estaban los chicos afectados. Dijo además que eran jóvenes de unos 13, 14 años, de secundaria.
Como consejo finalmente el doctor pidió que todos los ambientes tengan abiertas las ventanas, unos dos centímetros, para que no se concentre el gas. Dijo también que la llama de las estufas siempre debe ser de color azul, porque cuando es amarilla o naranja ya existe la presencia de monóxido.