María Rosa Stefanic, de 52 años, es la antigua dueña del Hotel Dubrovnik, que fue construido en 1986 y se derrumbó durante la madrugada de este martes en Villa Gesell. “Rosita”, como le dicen, hace unos tres años buscaba venderlo, algo que finalmente logró meses atrás.
“Enviudó y estaba cansada”, aseguró en diálogo con TN Jorge Cocco, director de la Asociación de Hoteles, Confiterías, Restaurantes y Fines de Villa Gesell, y que también es amigo de la mujer.
Quien compró el Dubrovnik es un empresario del rubro del transporte. El último tiempo, el nuevo propietario estuvo a cargo del lugar y de todas las obras que se estaban realizando para la temporada que se viene.
“Rosita”, que sigue siendo intensamente buscada al igual que otras seis personas, quería cambiar de aire y ya había adquirido una propiedad en la ciudad de Madariaga, a 50 kilómetros de Gesell. Sin embargo, iba a quedarse durante todo el verano en el hotel que se derrumbó para acompañar al nuevo dueño y ayudarlo con el personal.
“Al haberlo vendido, me presentó al nuevo dueño. Con él hablamos del verano y de cosas relacionadas al hotel. En la charla me dijo que estaba poniéndolo a punto”, explicó Cocco, y precisó: “Estaba haciendo un ascensor para subir desde la cochera al lobby y de ahí a la conserjería. El ascensor no fue el motivo del derrumbe por la forma en la que cayó el edificio”.
Del mismo modo, consideró que el motivo por el cual se derrumbó podría tener que ver “con algo que estuvieron haciendo en la cochera. Tocaron columnas básicas y eso debilitó el edificio”.
“Era un hotel de los más importantes que tiene Villa Gesell. Ella estaba desde que se empezó a construir, es una mujer querida”, sostuvo Cocco, quien se enteró del derrumbe alrededor de las seis de la mañana.
Las autoridades siguen en la intensa búsqueda de las personas desaparecidas, entre quienes también se encuentran el sobrino de “Rosita”, Nahuel Stafanic, de 25 años, y su novia, Dana.
Hasta el momento, se confirmó la muerte de un hombre de 89 años, identificado como Federico Cioccini. Su esposa, María Bonasa, fue rescatada con vida. Ambos estaban vacacionando en una casa contigua al hotel que fue afectada por el derrumbe.
Tras el derrumbe, la Justicia ordenó la detención de cuatro personas. La Fiscalía General, a cargo de Diego Escoda, confirmó el arresto de tres obreros y un capataz que ocupaban un departamento en la parte inferior del hotel Dubrovnik y son quienes ejecutaban una obra en el lugar.
De acuerdo a lo que indicaron fuentes de la causa, se investiga además la responsabilidad de dos arquitectos que tenían bajo su órbita las reparaciones que se hacían en el hotel.
El expediente, caratulado como “estrago culposo agravado”, está a cargo de la fiscal Verónica Zamboni, quien investigó el crimen de Fernando Báez Sosa y que llegó al lugar la madrugada del martes.